8 casas de té de Bariloche para probar las mejores delicias
Uno de los mejores planes para hacer en Bariloche, especialmente en invierno, es tomar algo calentito y comer las mejores tortas en una casa de té.
Si estás pensando en viajar a Bariloche y querés aprovechar esta tradición, te dejamos 8 casas de té de Bariloche para que elijas la que más te guste.
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Las mejores casas de té de Bariloche
1. Bellevue
Pionera de las casas de té de Bariloche, Bellevue sirve las mejores delicias desde 1982.
Bellevue parece una casa del cuento de Hansel y Gretel. Medio escondida en el bosque, se llega a ella mediante un corto sendero de rosas, hortensias y tulipanes.
Ubicada en el km 24,6 de la Av Bustillo, con vista sobre el lago Moreno, en días de buen clima se puede ver hasta el cerro
La historia de Bellevue comienza en 1945 cuando Rolf Geczynski, un inmigrante alemán y su mujer Karin compraron un lote en Bariloche en un remate en Buenos Aires y se mudaron en una época en la que aún no había casi nada.
El nombre Bellevue que eligió para su negocio viene de un palacio de Berlín, de donde el matrimonio era oriundo.
En 1982, comenzaron a servir el té en el living de su casa junto a la estufa a leña. Karin servía la torta de avellanas que le había enseñado su madre a la que se le sumaron otras recetas.
Actualmente el hijo menor está a cargo del lugar. Karin a veces toma los pedidos.
Entre sus especialidades, están las tortas acompañadas de alguna infusión.
Recomendación: El té Bellevue
2. Chiado
Con la mejor vista al lago Nahuel Huapi, Chiado está ubicada en el km 17,9 de la Av Bustillo, muy cerca del inicio del Circuito Chico.
Si te toca un lindo día, lo mejor es su terraza, la cual tiene la mejor vista al lago.
Su decoración tiene un estilo muy particular, con lámparas creadas con objetos cotidianos y una mezcla de elementos vintage en sus paredes.
Para tomar, se puede pedir cualquier infusión, licuados y por supuesto, el clásico chocolate caliente barilochense. Para comer, su especialidad son las tortas.
Tiene una oferta variada que incluye clásicos como el cheesecake y carrot cake y otras más originales, como la New York Cheesecake. También ofrecen opciones con productos regionales y recetas internacionales.
Recomendación: New York Cheesecake
3. Equs
Al llegar a Equs, nos transportamos directo a Gales y todas sus tradiciones.
Ubicada en el km 18,5 de la avenida Bustillo, al comienzo del Circuito Chico, Equs fue fundada por inmigrantes galeses que llegaron a la Argentina en 1865 y hasta hoy en día conserva sus tradiciones ancestrales.
Además de una casa de té, es una posada con 6 habitaciones amplias con todos los servicios.
Equs no tiene un menú a la carta, sino que su té consiste en un menú tradicional galés armado que incluye té en hebras libre, pan casero, dulces caseros orgánicos, scon dulce y salado con pasta de ciervo ahumado, queso de campo, una degustación de tartas dulces y la tradicional torta galesa.
Este menú bien completo viene de una tradición galesa, donde las familias se reunían a tomar el té como excusa para compartir con toda la familia lo hecho durante el día.
Otra particularidad de Equs es que además de sus exquisitas delicias, tiene un pequeño museo sobre la historia de los inmigrantes galeses.
Si te das una vuelta por su jardín, se puede ver cómo cultivan de forma sustentable la mayoría de los ingredientes de sus preparaciones.
Lo ideal es reservar porque no hay muchas mesas y se llenan bastante rápido.
4. Winter Garden del Llao Llao
No podíamos dejar de mencionar al emblemático Llao Llao en esta lista, que por supuesto tiene su propia casa de té.
Ubicada en el Winter Garden (jardín de invierno) del mítico hotel, te transporta automáticamente a una película de época de la realeza europea.
Las mesas están separadas y provistas de amplios sillones con apoyabrazos. La vajilla finamente ordenada y los mozos siempre atentos.
La pastelería es digna de un hotel 5 estrellas y sin dudas la mejor de Bariloche.
Las delicias están ubicadas en una mesa central desde la cual se puede elegir entre variedades de mini tortas de todo tipo, scons, pan de queso, tartas de frutas, mini sándwiches de salmón o jamón crudo y hasta chocolate en rama.
El precio es único e incluye acceso libre a la mesa de comida, dos bebidas calientes, jugos y una copa de vino espumante. Obviamente su valor es acorde al nivel del hotel.
Demás está mencionar la privilegiada vista al Nahuel Huapi que ofrece el Llao Llao.
5. Paila Co
Pila Co es como ir a tomar el té a la casa de tu abuela. Su decoración antigua, con mesas con flores pintadas a mano, estantes con tés y teteras con fundas tejidas a crochet.
Con una de las mejores vistas sobre el Nahuel Huapi, está ubicada en la península San Pedro, de la Villa Campanario a la derecha.
Paila Co también nace de una historia de inmigrantes alemanes, que llegaron a la Argentina en 1950 y viviendo en Buenos Aires, compraron una casa de verano en Bariloche en 1976.
Al tiempo, decidieron mudarse finalmente a Bariloche, cautivados por su belleza y así es como convirtieron la casa en lo que hoy es Paila Co.
En su menú se pueden encontrar una variedad de tortas alemanas como el Strudel, la torta Scher, y otras bombas con chocolate, crema, frambuesas y otras.
Además, se caracteriza por tener una increíble carta de tés de autor, con más de 20 variedades que combinan distintos tipos de tés, flores, hierbas y especias.
Paila Co se destaca en primavera y verano por su hermoso jardín repleto de flores.
Recomendación: Tarta de manzana
6. Meiling Tea House
Ubicada en el centro de Bariloche, Meiling, se destaca por ofrecer una amplia variedad de tés en hebras importados, de los cuales se pueden hacer degustaciones.
Para acompañarlos, tienen tortas, scons, budines, brioches, muffins y más cosas ricas expuestas en un mostrador de vidrio.
Todas sus elaboraciones son caseras y hechas en el día, por eso no hay un menú fijo. Lo mejor es acercarse y elegir lo que más te guste.
Tiene un estilo que combina lo vintage con lo moderno y su amplio deck es ideal para disfrutar de un lindo día de verano.
Recomendación: Degustación de tés con un scon
7. No me olvides
Ubicada a orillas del lago Gutiérrez, No me olvides es una casita del árbol en medio del bosque.
Cuenta con variedad de tortas y diferentes bocados dulces y salados que se pueden elegir del menú o también está la opción de té para dos, con la cual puede probar un poco de todo y es muy abundante.
Una particularidad es que sus tortas llevan los nombres de mujeres que han identificado a esa torta, como por ejemplo “la Carola” se llama así por la abuela paterna de la dueña y “Lupi” por una de sus mejores amigas. Los sándwiches, por otro lado, llevan los nombres de los varones.
Recomendación: El té de la casa (una mezcla de té rojo, naranjas, rosas y otras cositas)
8. La Escondida
Ubicada a pocos metros del lago Moreno, fiel a su nombre, se encuentra escondida en el barrio Lago Moreno.
Abrió sus puertas en 2019, lo que la convierte en la más nueva de todas.
El paso obligado a la playa por la calle sobre la que está ubicada, atrae a los turistas con una amplia variedad de productos caseros.
El clásico té que se puede acompañar con cheesecakes, muffins, lemon pie, budines y otras delicias elaboradas.
También ofrece cerveza artesanal de Blest que perfecto combina con algún sándwich de miga o las ricas pizzas y empanadas que sirven los fines de semana.
Además, ofrecen la opción de organizar pequeños eventos a puertas cerradas, para 10 o 12 personas.
Sus precios son más que accesibles que los de las demás.
